Otro aniversario de la Revolución Popular Sandinista. Tantos sueños rotos y esperanzas desvanecidas. Recuerdo que hace 28 años estaba refugiado en la Embajada de Venezuela con una herida en el brazo derecho por un disparo de la Guardia Nacional en mi ciudad natal, Matagalpa.

La dictadura somocista había llegado a su final y con ello toda la suciedad que cargaba. Anastasio Somoza se había ido con su querida, la Dinorah Sampson. Antes lo había hecho su esposa Hope Portocarrero y el último en montarse en el avión fue Anastasio Somoza Portocarrero ‘El Chigüín’ que se miraba como el continuador de su padre.

Hoy sólo son recuerdos históricos. La Dinorah, la mujer que volvió loco al dictador, es uno de ellos.
Dinorah y Somoza